“Caminando por la comunidad, le mostré donde estaba el templo -evangélico-, él pidió que fuéramos allí para darles la bienvenida. El Papa habló con el pastor y la gente que estaba allí, y los invitó a rezar un Padre Nuestro”, dijo, el sacerdote Márcio Queiroz.
“El Papa se detuvo frente a la iglesia y rezó con los fieles de la Asamblea de Dios, que estaban en la puerta.
Así que le pidieron una bendición. Fue un momento ecuménico, espontáneo y muy hermoso”, dijo, el portavoz del Vaticano, el padre Federico Lombardi. Suceso que ocurrió tras su visita a la comunidad de Varginha, en el Complejo de Manguinhos, Brasil.